Entonces educadoras vamos... esta semana hablemos sobre la fuerza…
¡Hey! ¿Pero que fuerza es esta?
Vamos a enseñarles a los niños y adolescentes que la mayor fuerza que podemos tener, viene de lo alto, de Dios.
Esa es una fuerza que dura para siempre y nos da la mayor victoria que es nuestra salvación.
VERSÍCULOS:
Isaías 40:29
“Él da fuerzas al cansado
y al débil le aumenta su vigor”
Cuando nos sentimos cansados Dios nos fortalece…
Son en los momentos de debilidad y cansancio que podemos ver que Dios
actúa dentro de nosotros.
En cuanto nos encontremos “fuertes”, haciendo todo a nuestra manera,
según nuestra fuerza, Dios no puede actuar, pues El no invade nuestras
vidas.
Pero en los momentos que nos sentimos sin vigor, si pedimos a Dios para
que el nos fortalezca, entonces su poder multiplicará nuestras fuerzas y
nos hará proseguir…
La fuerza que necesitamos está en Dios.
Habacuc : 3:19
“Porque el Señor me da fuerzas;
da a mis piernas la ligereza del ciervo
y me lleva a alturas donde estaré a salvo”
Salmo : 18:2
“Tú eres mi protector,
mi lugar de refugio,
mi libertador,
mi
Dios,
la roca que me protege,
mi escudo,
el poder que me salva,
mi más
alto escondite”
Efesios : 6:10
“Y ahora, hermanos, busquen su fuerza en el Señor, en su poder irresistible”