lunes, 30 de septiembre de 2013

8° DIA DEL AYUNO DE DANIEL

0



Llenaos del Espíritu
La expresión: llenaos del Espíritu (Efesios 5:18) se refiere a llenarse de los pensamientos de Dios, de Su Palabra.

Por otro lado, los sellados con el Espíritu Santo pueden "apagar el Espíritu", es decir, pueden llenarse de la basura de este mundo, aún sabiendo que están vaciándose del Espíritu.

¿Cómo es posible eso?

Las amistades contrarias a la fe han generado pensamientos como: Si disfruto de "mis amigos" allá afuera, ¿no los voy a ganar para Jesús?
Si me involucro con un incrédulo, ¿no voy a convertirlo?

Después de casada, ¿no voy a convencerlo de que venga conmigo a la iglesia?
La Palabra del Espíritu es clara, fuerte e inconfundible:

"No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo?" 2 Corintios 6:14-15

Existe una lista enorme de argumentos satánicos que cargan el veneno fatal.
No faltan ejemplos de eso.

Muchos bautizados con el Espíritu Santo Lo han apagado no por haber caído en tentación, sino por haberse resistido a los pensamientos Divinos y haber insistido en los pensamientos satánicos.
Caer en tentación no significa necesariamente perder el Espíritu Santo. Mantenerse en el pecado resistiéndose a Su Voz sí, eso puede ser fatal.

¿Quién, en su sana consciencia, aún siendo bautizado con el Espíritu Santo, nunca tuvo deslices? Nadie, salvo el Señor Jesús.
Pero cuando eso ocurre,

"Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si, aún así, alguno peca, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el Justo." 1 Juan 2:1.

En este caso, confiese el pecado y abandónelo inmediatamente.
Todos somos pasibles de errores, aún siendo sellados con el Espíritu Santo. A fin de cuentas, somos casas de barro.

Sin embargo, todos los sellados tienen la dirección del Espíritu alertándole en cuanto a la permanencia en el pecado. En el caso de que no haya un arrepentimiento inmediato, eso significa seguir "apagando el Espíritu".

Los no bautizados con el Espíritu Santo no tienen el discernimiento espiritual. A causa de eso, son más vulnerables a los ataques del mal.

Esa es la razón de invertir fuerte en el recibimiento del Espíritu Santo para mantenerse sano y salvo.

domingo, 29 de septiembre de 2013

7° DIA DEL AYUNO DE DANIEL

0



Señales del Espíritu
El derramamiento del Espíritu Santo no deja duda.
Aunque todas las voces del mundo unidas en coro a las del infierno lo negasen,
absolutamente nada es capaz de eliminar la Voz de lo Alto en lo más profundo del interior del alma.

La Voz dulce y fuerte del Señor Jesucristo hace callar a todas las demás con la plenitud de paz de espíritu.
Paz inexplicable seguida de un gozo del alma.

Son señales inapelables, evidentes y características del bautismo con el Espíritu Santo.
Es difícil hallar palabras que expresen tamaña experiencia.

¿Cómo explicar el sabor de un alimento apetitoso?
¿Cómo explicar el sentimiento de amor por alguien?
¿Cómo explicar lo sobrenatural con palabras?
¿Cómo explicar que el Todopoderoso, Señor de los Cielos y de todo el Universo viva en un mortal?
¿Cómo explicar el Infinito dentro de lo finito?

Un baño da la sensación de alivio y limpieza en el cuerpo.
El bautismo en las aguas da alivio y pureza en el alma.
En el bautismo con el Espíritu las aguas son el Espíritu de Dios.
El Bautizador es el Señor Jesucristo y,
el candidato es el pecador arrepentido.

Solo probando el Maná se podrá valorar el Sello de Dios.
No existen palabras ni melodías para describirlo…

Una cosa es cierta: la paz y la alegría fluyen como torrentes de agua desde lo más profundo del alma
Tamaña es su impetuosidad que es imposible contener el llanto y la risa de placer.
Son Ríos de Agua Viva que transbordan por todo el ser.
Los labios no acompañan la alegría del corazón.

Es que acaba de ser sellada una nueva criatura más.

Una criatura celestial.

sábado, 28 de septiembre de 2013

6° DIA DEL AYUNO DE DANIEL

0



¿Por qué el Espíritu Santo?
Porque el Espíritu Santo nos devuelve la imagen de Dios.
Porque el Espíritu de Jesús nos hace testimonios vivos de Su resurrección.
Porque el Espíritu del SEÑOR nos resucita para Dios.
Porque el Espíritu del Dios Padre nos revela al Dios Hijo.
Porque el Espíritu Consolador nos consuela en las horas amargas.
Porque el Espíritu de poder nos da fuerza para vencer todo el mal, inclusive al mundo.
Porque el Espíritu de sabiduría nos da habilidad para hacer Su voluntad.
Porque el Espíritu de entendimiento nos da discernimiento espiritual.
Porque el Espíritu de consejo siempre nos presta una palabra para el afligido.
Porque el Espíritu de fortaleza nos sustenta en las debilidades.
Porque el Espíritu de conocimiento nos da capacidad para evitar el mal.
Porque el Espíritu de temor del SEÑOR nos hace andar en Sus caminos.
Porque el Espíritu Santo nunca nos deja solos.
Porque el Espíritu del Altísimo guía nuestros sentimientos.
Porque el Espíritu de Cristo elimina la ceguera espiritual y nos hace ver la Tierra Prometida.
Pero,
"si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de Él." Romanos 8:9

5° DIA DEL AYUNO DE DANIEL

0



Maternidad Divina
Principio, Verbo, Dios, Vida, Él, Luz.
Son palabras del principio del Evangelio de Juan y de Génesis.
Todas revelan al Señor Jesucristo.

En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios.
Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Juan 1:1-5

Jesús es el Génesis de la Creación.

Todo comienza con Él y para Él.
Jesús es la Tierra Prometida, separada por el desierto de este mundo; quien quiera llegar hasta Él tiene que vencer su desierto.

Llama la atención el hecho de que la Vida estaba en Él y por intermedio de Él generó vida en todo lo que Su Palabra profería.
Por eso Él era la Luz de los hombres.

La Vida, obviamente, se refiere al Espíritu Santo,
Estaba en Él y era la Luz de los hombres.

El Mismo Espíritu es derramado sobre los que se dedican como ofrendas vivas en Su Altar,
Para generar también vida y servir como la luz de los hombres.

Por lo tanto, para los que poseen la Plenitud del Señor Jesús – el Espíritu Santo – tienen poder para eso y mucho más donde quiera que estén por medio del Verbo o de la Palabra pronunciada.

Como Jesús fue El Principio de todas las cosas, El Génesis de la vida, por medio de Su Espíritu, existe poder en las palabras de Sus hijos para generar nuevas vidas.
De cierto, de cierto os digo: El que en Mí cree, las obras que Yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque Yo voy al Padre. Juan 14:12

4° DIA DEL AYUNO DE DANIEL

0

Plenitud de Dios



Porque de Su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Juan 1:16

De forma incisiva, el apóstol Juan afirma que todos los bautizados con el Espíritu Santo han recibido la Plenitud del Señor Jesús además de gracia sobre gracia.

O sea: antes de que el SEÑOR exija nuestra vida por entero, primero Él dio Su Vida por entero en el Calvario.

Y como si no bastase, tras haber cumplido Su misión, Él regresa a este mundo podrido a través de Su Espíritu para vivir en el cuerpo que se ofrece a Él.

¿Podríamos darnos el lujo de devolverle solo una parte de nosotros?
¿Es justo que Él nos haya dado 100% de Sí y a cambio reciba solo 99%?

Medite en esta Promesa Suya:
De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de Mí y del Evangelio, que no reciba, cien veces más ahora en este tiempo casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero, la vida eterna. Marcos 10:29,30

Quien esté dispuesto a recibir la Plenitud de Dios tiene que estar dispuesto a darle la plenitud de su vida. 

Es todo por todo.